Millones de niñas y mujeres en países en vías de desarrollo sufren patologías pélvico-genital provocadas por trauma perineal, mutilación genital, abusos sexuales o secuelas obstétricas.
La falta de personal capacitado para su tratamiento y rehabilitación limita gravemente su calidad de vida física, psicológica, social y sexual.
Desde Ser Madre Ser Mujer trabajamos para que estas niñas y mujeres puedan recibir atención especializada en su propio país, formar a profesionales locales y educar a la población en salud sexual y reproductiva, contribuyendo así a mejorar su bienestar y empoderamiento.